domingo, 30 de octubre de 2011

Qué raro, cantarle esta canción a un extraño...

Bueno, hoy quiero dedicarle esta entrada a una chica que hoy mismo ha descubierto este blog, y como amiga de una amiga mía, ahora es mi amiga, ¡y se merece un rinconcito también aquí! Para ti Brittany Spears.

"Si pudiera mejorar, algo que haya hecho mal, ven dime, por favor, no aguanto más.. Si tú quieres terminar para no verme jamás... No vuelvas." - Nunca más. Georgina. 

No veo el día en el que no pienso que algo hago mal. Es normal, somos humanos (o eso dicen), pero hay que reconocer que somos muy autodestructivos. Empiezo el día feliz; por la tarde, entre discusiones y la ... intervención del universo acabo algo tocado; y luego ya.. mi amigo el crepúsculo. Una montaña rusa de pensamientos melancólicos, felices, deprimentes, incoherentes, conformistas, rebeldes, optimistas, fatalistas... 

Es por las noches cuando mi mente decide convertirse en una ruleta que cada cinco segundos apunta a un lugar totalmente distinto. Frustrante es la palabra, porque no soy ajeno a esos cambios. Es como intentar sacar la cabeza en un mar embravecido, las olas te golpean una y otra vez, tú no hace más que tragar agua y ellas no hacen más que hundirte. (*) 

Mis ideas combaten entre sí y yo, sea lo que sea ese "yo", no me decanto por ninguna. Un mero espectador en mi propio debate. Luego llegan las confusiones y la imposibilidad de conciliar el sueño. He visto que casi siempre, me acuesto con una idea negativa. Las Euménides duermen en mi misma cama y tejen en mis sueños con ayuda de Morfeo, las más enrevesadas pesadillas y sueños dementes. 

Cuelan a personajes embriagadores, que me hacen beber directamente de la felicidad, para que luego se esfumen con un soplo onírico dejando sólo humo tras de sí. Mi cabeza se retuerce por las noches, me despierto cansado pero con un renovado espíritu. Un ciclo repetitivo del que nunca me cansaré, que aborrezco, que acepto, que me hiere, que añoro... la controversia o la dualidad es lo que, quiera o no, me define. 

¿Encontraré esa mano que me saque del torbellino? o, por el contrario, me sumergiré eternamente en el mar de dudas que es mi conciencia. 








(*) Esto no es una alusión a problemas con féminas, que nos conocemos, paranoicos todos.


1 comentario:

  1. Haaaala Hector, si está genial ^^ No sé cómo me decias que no me hiciera ilusiones! :D
    Muchisimas gracias por mencionarme en tu entrada de nuevo, me ha encantado *_*
    Un besiito, te quieroo! :D <3

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